Os animo a que en esta Semana Santa elaboréis estas torrijas saladas de tomate y jamón ibérico, servidas sobre una cama de rúcula aliñada, ideales para el aperitivo o para servir cuando queráis comer a base de tapas.
De la torrija tradicional, solo conservan el pan o base que puede ser un pan dulce de los especiales para torrijas o un pan blanco de uno o dos días y la técnica de remojarlo antes de freírlo o tostarlo, pero estas torrijas no llevan ni leche ni azúcar.
INGREDIENTES (para 4 personas):
- Pan para torrijas 4 rebanadas
- Tomate triturado 250 ml
- Rúcula
- Aceite de oliva virgen extra
- Jamón de Embutidos La Hoguera, Raza Duroc
- Vinagre de Jerez
RECETA:
- Ponemos el tomate triturado y pasado por un colador en una bandeja y sobre él vamos colocando las rebanadas de pan de torrijas -o pan blanco candeal del día anterior- para que puedan empaparse. Dejamos unos 15 minutos por cada cara hasta que el pan esté blandito y bien impregnado.
- Ponemos a calentar una plancha y cuando esté bien caliente, tostamos nuestras torrijas de pan con tomate durante tres o cuatro minutos por cada cara. El tomate exterior se tostará un poco y aportará un sabor interesante a la torrija.
- Mientras, aliñamos la rúcula en un bol, con una mezcla de aceite de oliva virgen extra y vinagre de Jerez. Escurrimos las hojas una vez aliñadas y las colocamos sobre nuestras torrijas calientes tras sacarlas de la plancha.
- Ya solo falta cubrir la rúcula con abundante jamón, al que daremos volumen enroscando cada lasca sobre sí misma para que en una rebanada nos puedan entrar tres o cuatro cilindros de jamón, para alegría de los comensales.
Las torrijas saladas de tomate y jamón ibérico son un excelente entrante o receta de aperitivo que puedes servir antes de un plato fuerte que sirva de plato único. Visita nuestra tienda online de embutidos y elige el jamón que más te guste para elaborarla.
Receta de: Pakus (Directo al Paladar)
